En Brooklyn 99 existe una pareja romántica, atractiva y heterosexual: Jake y Amy. Sin embargo, están lejos de ser la relación más significativa en esta comedia. Jake y Raymond, por otra parte, se roban los reflectores, y entre ellos, es el personaje de Raymond Holt el que crea las principales tensiones, siendo su llegada la que motiva la evolución de Jake y de los otros miembros del equipo.
Brooklyn 99 ha sido la ganadora de dos premios Creative Emmy y dos Globos de Oro. Su éxito se debe a que puso en pantalla una serie policial con un enfoque fresco y personajes encantadores. Perteneció originalmente a la cadena Fox que la mantuvo al aire durante 5 temporadas. Es tanto el cariño que le tienen sus seguidores que cuando se anunció su cancelación, llevaron a cabo una campaña por redes sociales que impulsó a que la NBC encargara 18 nuevos episodios que formaron parte de su sexta temporada. Actualmente Netflix tiene sus 6 primeras temporadas disponibles en varios países y se ha anunciado la preparación de una octava.
Lo que hace especial a Brooklyn 99
La serie nos cuenta la historia de un grupo de detectives de la de la comisaría 99 del Departamento de Policía de Nueva York. Pese a su temática, Brooklyn 99 logra matizar la eterna lucha entre el bien y el mal y confronta a la típica figura de héroe. En lugar de hacer énfasis en los logros del policía temerario y violento que gana todas las batallas, la serie presenta a un policía audaz e inmaduro que desea parecerse a estas figuras de acción, en contraste con personajes estrategas y analíticos que cumplen con su trabajo de formas menos espectaculares.
La historia arranca con la aparición de Holt como el nuevo capitán de la comisaría. Es la nueva autoridad del recinto y su figura impone un cambio en las relaciones entre sus miembros y en sus actitudes a nivel profesional. Más adelante vamos a ver cómo estas transformaciones también afectan las vidas personales de los personajes.
Uno de los aciertos de Brooklyn 99 está en la inclusión de personajes pertenecientes a minorías, como el de Rosa, que es uno de los pocos personajes bisexuales de la televisión. Holt pertenece a dos comunidades que han sido precarizadas y que han tenido pocas y malas representaciones en la pantalla chica: es negro y homosexual. Brooklyn 99, a diferencia de otras comedias, no usa estas características a manera de burla ni cae en el chiste fácil. La serie, más bien, elabora a este personaje de manera en que sus características ayuden a la audiencia a confrontar sus propios prejuicios.
Representante de la comunidad LGBT
Cada día es más común encontrar a personajes que forman parte de la comunidad LGBT en series y películas. Sin embargo, estos personajes en muchas ocasiones singuen sin ser bien representados. A lo largo de la historia, pantallas grandes y pequeñas han censurado, ridiculizado o encasillado a la comunidad en clichés dañinos.
Brooklyn 99 rompe algunos de estos clichés con el personaje de Raymond Holt. A diferencia del estereotipo, él no tiene rasgos típicamente femeninos, no exhibe, pero tampoco oculta su homosexualidad. Aparece en una posición de liderazgo e infundiendo respeto. Es un hombre sensible y profundo, pero no es excesivamente demostrativo, sino más bien indescifrable. Está casado con Kevin Cozner, con quien tiene un vínculo principalmente intelectual y un compromiso emocional a largo plazo. La serie no lo muestra como alguien que tenga miedo a exhibirse o «miedo a las plumas» sino simplemente como a un hombre que, entre otras cosas, es gay.
Quién es Raymond Holt
El personaje de Raymond es uno de los más complejos, y no parece casual que hayan elegido a Andre Braugher para interpretarlo. El actor previamente había sido nominado y galardonado por su participación en producciones dramáticas: Ganó un Primetime Emmy como Mejor Actor por su personaje en la miniserie dramática Thief. También obtuvo el Premios Satellite a Mejor Actor de serie dramática por el policial Homicide: Life on the Street. Con Brooklyn, su primera serie cómica, las nominaciones no se detuvieron y obtuvo el premio a Mejor Actor de Reparto en los Critics’ Choice Television Award.
Ray es uno de los personajes más queridos de la serie y no es en vano. La historia nos deja ver que creció en un entorno hostil y que sabe usar todo lo que ha aprendido para ayudar a crecer a otros. Sabemos que en sus primeros años en la policía le costó mucho trabajo ganarse el respeto de sus compañeros. De esta forma la serie nos recuerda realidades de la historia estadounidense que no se pueden ocultar. Holt es un hombre que aprendió a trabajar duro para poder convertirse en sargento y que, pese a las dificultades, se muestra abiertamente orgulloso de haber logrado crecer en una organización que fue racista y homofóbica.
Raymond sabe competir y trabajar en equipo, sabe cuándo y contra quién pelear y, lo que es más importante, sabe cuándo no es necesario hacerlo. Es un personaje fácil de admirar y un excelente líder que siempre está un paso adelante de los acontecimientos. Su sensibilidad y capacidad de análisis permiten que esté al tanto de las particularidades de su equipo de trabajo y sacar su máximo potencial.
La relación entre Raymond y Jake
Jake Peralta es el protagonista de esta serie. Es un hombre blanco y heterosexual que ha construido su carrera y su vida adulta a partir de referentes de acción de la cultura popular. Su modelo a seguir es John Mclaine, de Duro de Matar, a quien quiere emular tomando decisiones arriesgadas que lo coloquen en el centro de atención. Debido a sus privilegios no nos sorprende que Jake quiera sostener su estatus quo. Además, antes de la llegada de Holt, sabemos que estaba acostumbrado a manejarse dentro de un ambiente de «libertades» y con pocas reglas. Raymond aparece en un lugar de autoridad a darle órdenes directas y obligarlo a que las cumpla. En breve entendemos que es una figura paterna que necesitaba en su vida.
La relación, que en el principio es motivo de tensión, rápidamente se convierte en una oportunidad de crecer para Jake. A pesar de sus referentes y de su inmadurez logra adaptarse. Él, al igual que muchos hombres de su generación, creció con el deseo de ser un héroe, un G.I. Joe de carne y hueso. Sin embargo, el liderazgo de Ray y su ingenio hacen que aprenda a trabajar en equipo y lo ayudan a obtener mejores resultados rompiendo arquetipos.
Las cosas están cambiando y Brooklyn 99 es parte de ese cambio
Las películas y series han contado historias policiales durante décadas. La mayoría de estas narrativas buscan emocionarnos a través de la aventura y hacen énfasis en la figura de un héroe hipermasculino que arriesga su vida y no piensa dos veces antes de matar a su enemigo. Muchas de estas producciones han reproducido estereotipos machistas y exaltado la violencia. Por otra parte, la industria cinematográfica ha fallado al momento de representar a la comunidad LGBT con la exposición repetitiva de características estigmatizantes. Brooklyn 99 muestra que hay otras posibilidades dentro de este tipo de narrativas.
En el primer capítulo, Raymod Holt se presenta en la comisaría y la única que se pregunta si es homosexual es Gina. Cuando revela que sí, la broma es que no lo anticipamos. Lo gracioso es descubrir que hemos aprendido a reconocer a los homosexuales por patrones que nada tienen que ver con su orientación sexual. Nos reímos de nosotros mismos, de lo fácil que nos resulta caer en estereotipos y si reconocemos estos errores es porque las cosas están cambiando.
Resulta refrescante ver una serie que busca salir de los moldes y mostrar estas temáticas desde otra perspectiva. Cuando una comedia se burla del oprimido, repite patrones ofensivos que fortalecen el estatus quo. Si, por otra parte, la broma se gira hacia los opresores, la comedia lleva a la audiencia a cuestionar su forma de ver el mundo. Existen otras producciones, como ‘Malcolm el de en medio’, que sentaron antecedentes en su forma de hacer comedia y puestas en escena, como ‘Nanette’, siguen buscando formas de romper con los arquetipos para que podamos vernos y cuestionarnos como sociedad. A su manera, Brooklyn 99 también nos invita a reflexionar mientras nos hace reír. Tal vez, al igual que Jake, abrirnos a ver el mundo desde otras perspectivas nos ayude a ser mejores personas.
¿Ya viste Brooklyn 99? Cuéntame en los comentarios cuál es tu personaje favorito. Cero Presión, pero espero que sea Holt.
Excelente artículo. La escena del primer capítulo dónde se revela que Holt es gay, sin duda es una pieza hermosa de la comedia.
Me encanta la serie, el humor que utiliza y los conflictos a los que enfrenta a sus personajes.
#TeamHolt